Directivos con ritmo: donde música y empresa convergen
- «Tu vida no siempre se centra en una cosa, y para mi la música ha sido esa especie de fondo que siempre me ha ayudado a seguir hacia delante en todo»
La música mueve nuestro mundo. Al compás del director de orquesta, la empresa se asemeja a una canción en vivo, donde el tempo y la complicidad son fundamentales. Seguir la partitura es importante, pero también hay lugar para la improvisación.
En este ‘De La Crème‘ conocemos a directivos y directivas apasionados por la música y todo lo que la rodea, al mismo tiempo que la compaginan con su lado profesional.
La música, pasión vocacional y desarrollo profesional
- ¿Qué es lo que te atrapó del mundo de la música? ¿cuándo sucedió?
Michel Zarzuela: En nuestro caso, nadie pensaba que nos podíamos dedicar a la música porque fue un movimiento prácticamente reivindicativo. Fue un movimiento que se desarrolló en distintos barrios, pero en Torrero le dimos un aspecto musical sin entender y sin saber que aquello iba a crear La Banda del Canal que desde 1977 no ha dejado de funcionar.
David Gascón: La música forma parte de la vida misma. El ser humano, por definición, es un ser de lenguaje pero también musical. A partir de ahí vamos desarrollando. Lo único que cambia a lo largo del tiempo es la forma de expresión. Es un especie de esencia que llevamos dentro y, de alguna manera, es normal que estemos arraigados a ella.
Justo Peña: Mis primeros pasos en la música fue porque comencé a poner música en 1984 en los primeros ‘garitos’. Manejábamos a mucha gente y muchos estilos, incluso a las propias modas.
Ángel Gil: En mi caso fue de bastante jovencito, ya que mi hermano mayor entró en la tuna y me metió el ‘veneno’ en el cuerpo. Y él fue el que me enseñó los primeros acordes con la guitarra. He disfrutado muchísimo cantando, bailando, viajando por el mundo y haciendo feliz a la gente.
- ¿Te has planteado alguna vez o has estado cerca de que la música fuera tu carrera profesional?
Marta Sánchez: Sí, de hecho, hubo un tiempo que formó parte de mi carrera profesional. Me dediqué al mundo del management y fui promotora musical. También hice mis pinitos como DJ profesional.
David Gascón: Siempre lo ha sido. Llevó pinchando en vinilo desde los 18 años y después pasé al mundo de la producción. Mientras todo esto pasaba, vino la empresa. Tu vida no siempre se centra en una cosa, y para mi la música ha sido esa especie de fondo que siempre me ha ayudado a seguir hacia delante en todo.
- ¿Es la música tu forma de desconectar del trabajo o hay conexiones entre los dos mundos?
Justo Peña: Utilizo la música para relajarme de mi trabajo. Además, gracias al programa de radio que tengo la utilizo de psicólogo y conjugo ambas cuestiones.
Ángel Gil: Es difícil conjugar esa parte musical para hacerla partícipe de tu mundo profesional. Aunque es cierto que, en mi trabajo, en todos los eventos que organizo intento siempre poner el toque musical. Hace poco realicé un evento donde visualice que la logística era reina, ‘LOGISTICS IS THE QUEEN’, y organicé un tributo a Queen. Fue un exitazo en todos los sentidos.
Enrique Iniesta: La música para mi sirve como un complemento para el trabajo. Colocarte de fondo algo de música, viene bien para desconectar.
Michel Zarzuela: En el año ’77 nace La Banda del Canal, pero, en mi caso, entro a trabajar en el ’82 en el Ayuntamiento y empiezo a trabajar en el ámbito de cultura. Para mi ha sido un placer el disfrutar de esas dos opciones.
Música y empresa, ¿dos mundos interconectados?
- ¿Sería diferente tu vida profesional sin la música?
Enrique Iniesta: Yo no entendería la vida sin música. Nietzsche decía que la vida sin música sería un error. Es la banda sonora original de nuestras vidas y es algo irrenunciable.
Marta Sánchez: Por lo menos para mi caso, necesito la música. La música me inspira y, muchas veces, cuando tengo algún bloqueo, la mejor manera de salir es a través de ella.
- ¿Con qué genero musical asociarías a tu organización?
Justo Peña: Mi socia no sé qué diría, pero, para mi, Activa Design es una empresa ‘funkarra’. Es una empresa de música divertida que te hace bailar, disfrutar y vivir.
Marta Sánchez: Tanto al ayuntamiento como a cualquier empresa, lo asociaría al progressive. Siempre pienso que cuando inicias un proyecto tienes un tempo, y conforme se va acercando el plazo de entrega todo se vuelve más intenso hasta que culminas y vuelves al inicio más tranquilo.
Enrique Iniesta: Muy posiblemente sería la bossa nova, porque es una música que tiene que estar muy acompasada y entender todas las armonías. En Pikolín, que somos muy de hacer algo que nos quite el sueño, queremos entender al mercado y bailar con él al ritmo de la mejor música.
- ¿Qué te resulta más sencillo, desenvolverte en el mundo empresarial o en el musical?
David Gascón: En ninguno. Primero, porque es una competición continua contigo mismo y con lo que se pide fuera. El arte es, bajo mi punto de vista, superior respecto a la ciencia o la ingeniería ya que se anulan a sí mismas continuamente. En la ciencia o la tecnología, la nueva versión del teléfono móvil anula a la anterior e igual pasa con las versiones de la alta velocidad de internet. Sin embargo, el arte es una forma continuada de dejar algo que somos nosotros en parte, pero que va más allá una vez lo hemos arrojado.
Michel Zarzuela: Afortunadamente no tengo esa contradicción. Hubo algún momento en el que sí me ocasionó algún problema circunstancial, pero pasó hace ya tiempo.
Ángel Gil: El mundo de la música siempre ha estado muy ligado a la tuna, que es una forma de vida. Me ha enseñado a cómo comportarme en situaciones muy diversas y diferentes con estratos muy diversos, lo que me ha ayudado mucho en mi vida profesional. Más que la universidad por la que pasé en su día, la tuna y la música han sido mi verdadera escuela de vida.
Este ‘De La Crème’ contó con la participación de Silvia Canut, de Coloriuris, patrocinadores de este formato y empresa encargada de «certificar lo que ocurre en internet».