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Conrado Molina: «Zaragoza tiene mimbres para estar en la alta competición del turismo»

  • El gerente de Zaragoza Turismo protagonizó una Mesa Abierta en la que se habló de las fortalezas y debilidades de la ciudad como destino turístico

Con una trayectoria muy variada y grandes experiencias a su espalda, Conrado Molina llegó a Zaragoza Turismo en un momento muy complicado: tras dos meses en el puesto de gerente se decretó el confinamiento por la Covid-19. Pero Molina ha sabido reconducir la situación y convertir la dificultad en oportunidad para analizar las capacidades de nuestra ciudad para captar turismo, digitalizar el servicio y prepararse para salir a competir en cuanto la situación lo permita.

En una amena Mesa Abierta patrocinada por Kalibo, Molina explicó cuál ha sido su trayectoria y cómo ha afrontado los retos que le han ido surgiendo. «Realmente mi oficio es panadero porque mi padre tenía una industria panificadora y desde pequeño le ayudé. Empecé la carrera de Económicas, pero cambié a Derecho, y compaginaba los estudios trabajando como agente de seguros». Tras la carrera, Molina hizo un MBA Internacional y ahí empezó su contacto con el mundo del Marketing, gracias al profesor Juan Delgado, que le llevó a hacer prácticas a su empresa de consultoría. Después trabajó en una agencia de comercio electrónico e intentó emprender. «Dos veces monté una pequeña consultora, pero fracasé en ambos intentos. Me sirvió para aprender lo que no hay que hacer».

Pasó otra vez al sector de seguros, pero semipúblico, en Asepeyo, llevando la gestión directa de grandes cuentas en la época de la Expo, con las UTEs que participaron en las obras. «Mi siguiente etapa fue en el Real Zaragoza. Diseñamos la campaña ‘Zaragoza no se rinde’, que enganchó mucho a la afición y me incorporaron a la estructura del club, pero justo entonces el equipo descendió». Fue una etapa de cinco años complicada, con descensos y cambios de directivos, pero también de ahí extrajo experiencias muy útiles.

Su siguiente destino fue la Universidad San Jorge, donde llevó el área de Información universitaria y marketing. «Conseguimos los mejores números de captación hasta el momento, se abrió mercado a otras comunidades (vinieron desde Canarias entre 7 y 14 alumnos cada año) y di clases en el master de Comunicación corporativa y marketing». Tras esta etapa, recaló en El Dorado, un salón de juego, llevando el área de Marketing, comunicación y relaciones públicas. Entraron en patrocinios y acciones de responsabilidad social, pero el sector era muy complicado. De ahí se presentó al puesto de gerente de Zaragoza Turismo.

«Me incorporé al puesto el 14 de enero de 2020 y me pasó una experiencia similar a mi llegada al Real Zaragoza: dos meses después nos confinaron».  Molina se encontró con un equipo con «una capacidad de trabajo espectacular y con mucha experiencia» y fueron pioneros en España en certificarse como espacios seguros. «Hemos trabajado en digitalización, automatización de marketing, política de responsabilidad social… muchas cosas que con la vorágine del trabajo diario no hubiéramos podido hacer». Su objetivo es lograr el máximo impacto con pocos recursos y utilizar la digitalización para medir todo con indicadores y poder sectorizar: ofertas para turismo familiar, turismo gastronómico, de pareja…

«Zaragoza tiene mimbres para estar en competición europea perfectamente: patrimonio, gastronomía y los propios habitantes. La nueva área de proyección exterior del Ayuntamiento está realizando un análisis DAFO. Queremos saber lo que somos para saber a qué podemos aspirar«. Molina destacó como fortaleza la propia forma de ser de los zaragozanos, que hace volver a muchos visitantes. «Somos una ciudad muy desconocida que sorprende siempre al visitante».  Resaltó la idea de vincular Zaragoza con Goya, «que los propios zaragozanos se crean que somos la ciudad de Goya. Como Málaga con Picasso, aunque no tengamos un Antonio Banderas que nos haga publicidad».

Molina propuso crear sinergias con la provincia, y con Huesca y Teruel, para alargar el número de pernoctaciones, así como mantener las relaciones entre instituciones y colectivos. «Hemos conseguido una de las vicepresidencias de la red de ciudades AVE, estamos muy involucrados con la Spain Convention Bureau, la relación con los departamentos de Turismo de Gobierno de Aragón y DPZ es excelente, mantenemos un estrecho contacto con las asociaciones Horeca y Cafés y Bares…  La unión hace la fuerza».

 

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