Conocer a Lucas Aísa: la persona, la marca
- Como previa al Vermú de Redacción con Lucas Aísa de este viernes 1 de diciembre, Ramón Añaños repasa los temas que recorrerán la conversación de esta edición del networking gastronómico de Club Cámara.
Lucas Aísa es titular de una gran marca personal. Es, en realidad, una marca personal andante -o en moto, podríamos decir- a la que no le falta de nada: tiene su denominación –Calvo con barba-, elementos gráficos (muy) identificativos y un muy definido territorio técnico-profesional, entremezclado todo ello con naturalidad con una estética de vida rica y atractiva. Tiene un registro de comunicación y de relación muy perfilado y engrasado, que parte de un lenguaje llano, directo, desenfadado, lleno de giros, guiños y un sutil sentido del humor, donde se combina el establecimiento autorizado de posición sobre temas, casos y fragmentos de vida, y la conversación con amigos y seguidores. Cada red que maneja la gestiona con códigos, temas, tonos y estilos específicos. Y parece que no le cuesta.
Lucas se define como «mañostarra» (precisamente, ese estar a caballo sentimental entre Zaragoza y San Sebastián le ha dado la clave a Miguel Botica, el preparador de la parte gastro del vermú, para proponernos este día una cata a base de vino tradicional de Aragón y un chacolí guipuzcoano) y poliédrico: apasionado de (no sé el orden) su chica, el recuerdo de sus perros, sus motos (digo, sus Harleys), la comida -pasión está compartida por mí-, el esquí y el ejercicio.
Ya habíamos cerrado la participación de Lucas en un #VermúRedacción cuando tuvo la deferencia con nosotros de mejorar su caché resultando ganador de la distinción de “mejor Blog de Marketing de 2017” en competencia con algunos otros excelentes blogs en lengua castellana.
La distinción es más que merecida, porque Lucas es un observador incansable de la vida pública de las marcas, que analiza haciendo gala de un fresco espíritu crítico pasado por el tamiz de su instinto marketiniano y de sus convicciones: el valor de la autenticidad y la conversación (llegado este punto, rescato de mi memoria los casi 100 enunciados del Manifiesto Cluetrain de 2000) y el sentido común. Y todo esto, aderezado con citas y ejemplos (haciendo honor al valor del enlace, cuando se merece).
Si vamos a abordar durante el #VermúRedacción con Lucas interesantes temas de marketing a partir de su propio caso -ya hemos hablado de marca personal-, será imprescindible conocer de su boca la dinámica por la que alguien se convierte y ejerce de influencer y de embajador de marca y reflexionar con él sobre la manera como las empresas -el caso de muchos de los asistentes a esta cita- pueden usar este recurso para relacionarse con sus audiencias (en la medida que coincidan con la de los influencers, claro).
También me gustaría que Lucas nos hablara de su trabajo de consultor y de sus aportaciones a marcas tan interesantes como Aramon, NLK, Katuin, Cajalón, Cuéntica, ColorIuris, La Pastora… También sobre la relación con Vodafone, que consiguió que un día nos desayunáramos con una entrevista suya en la portada de los principales diarios digitales nacionales, dentro de una campaña de comunicación de la teleco.
Con todo esto, Lucas, para terminar, me pregunto… ¿Cómo te organizas? Haces consultoría, formación y das conferencias. Publicas semanalmente en tu blog y mantienes presencia muy activa en numerosas redes. Lees y piensas. Viajas por tu cuenta y reclamado por marcas y proyectos. Haces deporte. Coges la moto y haces rutas tremendas… ¿Cómo es vivir una cotidianeidad tan movida?
Paz.