ActividadesCanal expositivo

La realidad del metaverso para la empresa, ¿cada vez más cerca?

  • ECIJA Abogados organizó un Canal Expositivo para aterrizar y dar a conocer con exactitud la idea del metaverso, en qué momento está, cuales son sus posibilidades y sus riesgos.

Desde hace aproximadamente un año, cuando se empezó a hablar del cambio de Facebook a Meta, surgió el concepto del «metaverso», sin saber exactamente de qué se estaba hablando. Se ha convertido en un tema relativamente polémico: Se ha defendido como una gran herramienta para las empresas, se le ha vinculado a los NFT y a las criptomonedas, pero, ¿que de todo esto es verdad?

Para dar un poco a conocer todo este concepto, Cristina Llop (Socia) y Susana Gónzalez (Manager TMT), de ECIJA Abogados, firma de abogados especializada en nuevas tecnologías, vinieron a un Canal Expositivo al que también invitaron a Javier Ortizá, CEO de Quasar Dynamics, empresa de software especializada en crear marketing digital y experiencias de usuario únicas a través de formatos como los videojuegos, la realidad aumentada, la realidad virtual o los metaversos. Además, la sesión contó con la colaboración de La Pasión y Automáticos Rogar (LavAzza).

 

«En 1985 Steve Jobs decía que íbamos a estar todos conectados a través de una red de comunicaciones le tomaron por loco. La cuestión ahora es si el metaverso es el nuevo internet». Así abría Cristina Llop la sesión, con una pregunta fundamental. Pero primero, antes de preguntar si es el futuro, debemos conocerlo, saber qué es el metaverso, o los metaversos. No hay una definición exacta ahora mismo, pero según Susana González, es «una evolución del Internet que conocemos ahora mismo. […] Es un espacio virtual inmersivo donde vamos a poder interactuar con objetos virtuales en tiempo real». Ahora mismo, para Susana no hay un metaverso, ya que no hay una inmersión completa, pero si hay premetaversos, es decir, un avance tecnológico intermedio que aspira a esa realidad, a ese universo digital de experiencias completamente inmersivas.


Pero sigue siendo un nuevo mundo, un cambio que puede llegar a ser tan grande como lo fue Internet, y, ahora que tenemos su ejemplo, surgen muchas preguntas al respecto. Las posibilidades que conlleva crear un universo son infinitas, solo nuestra imaginación nos limita. Pero también hay riesgos y cosas a tener en cuenta, preguntas a las que responder antes de lanzarse de cabeza a este mundo. Susana cita algunas, como qué pasa con los derechos de propiedad intelectual, los riesgos de ciberdelincuencia, qué datos serán los que se pueda recoger, cuáles serán las limitaciones legales que se le pondrá a este espacio, etc.

Porque los metaversos no dejan de ser «una evolución de la web». Internet hay uno, webs hay muchas. Y ahora mismo, todo el mundo puede crear su propio metaverso independiente y que está aislado del resto del metaverso. Para Javier Ortiza, «puede que sea la herramienta adecuada, puede que no. Lo importante es saber si esa tecnología es el valor añadido que necesita mi empresa».  Pero a lo que hay que aspirar, y el motivo por el que Javier cree en que esta herramienta puede llegar a ser la adecuada, es que grandes empresas se están uniendo para crear un entorno único en el que todos podamos crear nuestro pequeño mundo virtual, «al más puro estilo Matrix o Ready Player One», según el CEO de Quasar. Porque para él, esta tecnología «necesita ser social, no deja de ser una versión en 3D de tecnologías que ahora mismo trabajan en 2D.

Y volviendo al tema del que partía la charla. ¿en qué puede ayudar el metaverso a una empresa? Ortiza respondía de forma ambigua: «Depende de lo que busques. El metaverso ahora es una moda, todo el mundo quiere uno, pero hay que saber qué es lo que vas a hacer y ver si el metaverso actual es lo que te interesa o estás buscando otra cosa». Ahora mismo, las grandes empresas utilizan los metaversos cómo zonas de reunión, como una forma de acercar algo presencial a la gente que no puede acudir. También se puede usar como una plataforma de videoconferencia en 3D, como una forma de valor añadido para formatos presenciales o virtuales, y mucho más que aún no hemos descubierto. En palabras de Susana González: «quién sabe si vamos a ser la última generación en diferenciar lo digital de lo real».

La sesión finalizó con un pequeño almuerzo patrocinado por Lavazza y LaPasión que acompañó a una prueba de las experiencias realizadas en realidad aumentada por Quasar Dynamics, que generó un momento muy entretenido donde los asistentes pudieron comprobar lo inmersivas que pueden llegar a ser estas experiencias, sean o no interactivas.

Compartir:
Redaccion