Alfredo Roy: “Implantar Pilates en las empresas puede repercutir positivamente en sus resultados”

• Alfredo Roy, fundador de Pilates Avenue, contó en la mesa abierta de Redacción Club algunas de las claves del Pilates, en su doble vertiente como práctica saludable y fórmula empresarial.

Alfredo Roy es el fundador y director de Pilates Avenue, que ya cuenta con dos estudios para la práctica de este método en Zaragoza, en la calle Ramón Salanova y en La Floresta. Para hablar de esta aventura empresarial, Roy acudió a la mesa abierta de Redacción Club.

Alfredo Roy, de Pilates Avenue. Fotos: Arturo Gascón.

El caso de Alfredo Roy es el de tantos profesionales que encuentran en su afición una salida laboral. “De pequeño tenía problemas de sobrepeso, así que entré en el mundo de los gimnasios; fui cogiendo confianza hasta que, cuando llegó el momento de plantearme a qué me quería dedicar, decidí convertir la práctica deportiva en mi profesión”, relata. En este punto, señala la importancia de “invertir y apostar por la calidad en la formación”.
Roy reconoce que abrir Pilates Avenue, una decisión que tomó cuando ocupaba el puesto de coordinador en un centro deportivo, “no fue fácil”. Lo hizo en plena crisis, en 2011, pero gracias al asesoramiento de Cámara Zaragoza, a la apuesta de una entidad financiera y “al boca a oreja de las recomendaciones entre clientes”, en poco tiempo logró dotar de estabilidad al negocio. A esto añade su política empresarial: “No cobro nunca la primera clase, es la mejor manera de que te conozcan. E incluso esa sesión inicial siempre es con un grupo reducido o incluso individual”.

Alfredo Roy conversa con Berta Lorente, vicepresidenta segunda de Cámara Zaragoza.

¿Qué radiogradía hace del sector del Pilates en la actualidad? “Cualquiera puede hacer Pilates, y en los últimos años su práctica se ha extendido e incluso está recomendada por los médicos. Hay gente que se forma a través de tutoriales de Youtube, de coleccionables… Los grandes gimnasios también lo han introducido, aunque con clases demasiado masificadas. En todo caso, esto ha servido de puerta para que el público lo conozca y luego, cuando busca algo de calidad en Pilates, apueste por centros especializados”, cuenta Roy.

Alfredo Roy insiste mucho en la excelencia. Es algo que aplica a sus propios monitores, a los que forma personalmente, y también a las formaciones que imparte a otros profesionales. “A mí no me preocupa la competencia, sino la incompetencia; que un buen profesional pueda decir que se formó en Pilates Avenue me va a dar mejor posicionamiento, e incluso me permite contar con una mini bolsa de trabajo”.

Y para quien no esté familiarizado todavía con este método, Alejandro Roy lo define como “el arte de controlar el cuerpo”. La mecánica de ejercicios desarrollada por Joseph H. Pilates – “es importante adaptarla a cada persona”, precisa Roy- “ayuda a los sistemas músculo esquelético,  inmune y nervioso, ya que fomenta las conexiones neurológicas”. Uno de los pilares básicos es el control de la respiración: “La primera lección es aprender a respirar correctamente. Para mejorar la respiración del individuo es insuficiente decirle simplemente que inspira y exhala. Solo cuando entiende el funcionamiento de la correcta respiración puede transmitirse correctamente”, dejó escrito el creador del método, y tiene como lema Pilates Avenue.

¿Puede el Pilates ayudar a los negocios? “Muchos empresarios se están dando cuenta de que invertir en este tipo de actividades mejora las condiciones de los trabajadores y repercute en resultados positivos para la empresa”, opina. “En 2011 las compañías no estaban tan abiertas a estas ideas, pero ahora, con el fomento del ‘mildfulness‘, se plantean introducir estas prácticas en las oficinas”, dice Roy. Apunta que “implantar Pilates en la empresa tiene una inversión mínima” aunque, precisa, que se haga dentro o fuera del horario laboral ya depende de cada compañía.