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Marcos Bellvis: «Tener un equipo humano bueno y profesional es fundamental en una empresa»

  • El director comercial de Grupo Bellvis protagonizó una Mesa Abierta en la que habló de la evolución de la empresa y la situación del sector

El apellido Bellvis tiene solera y todos lo asociamos con inventos como el fregasuelos o la olla a presión. Marcos Bellvis forma parte de la cuarta generación del Grupo Bellvis y protagonizó una Mesa Abierta patrocinada por Kalibo en la que explicó cómo ha evolucionado el grupo empresarial y cuáles son sus principales proyectos.

La tradición empresarial de la familia viene de lejos. Su bisabuelo por parte de madre era el dueño de la imprenta La Moderna, que imprimía las cartillas de racionamiento tras la Guerra Civil; su abuelo materno fundó Polibol, empresa comprada recientemente por Saica; su padre hacía mantenimiento y vendía productos para los motores y fue el primero en patrocinar las carreras de Alcañiz… «Nuestro fuerte siempre fue la comercialización, pero con la globalización hubo que adaptarse a las nuevas técnicas».

Para Bellvis lo fundamental en una empresa es contar con un equipo humano formado por buenas personas y buenos profesionales. Sus dos hermanos, Carlos y Manuel, también se encargan de diversos aspectos en el grupo. Su padre se especializó también en pavimentos industriales y así surgió la sección de Pavimentos en Grupo Bellvis. «Quisimos diversificar y llegamos a contar con divisiones de Limpieza, de Logística, una fábrica de pinturas, etc.», pero en 2008 llegó la crisis y hubo que replantear el negocio. «Desde 2012 nos centramos en los productos en los que estábamos más especializados, sobre todo en pavimentos, y hemos hecho proyectos como el del matadero más grande de Europa o el del museo del Wanda Metropolitano».

El sector de los pavimentos ha evolucionado de manera brutal y en Bellvis asesoran a los clientes según sus necesidades. «Tenemos varios proveedores que nos suministran el producto en forma líquida (en bidones). Llegamos a la obra, preparamos el terreno con nuestras máquinas y aplicamos el producto a mano. El equipo tiene que trabajar al milímetro para que el producto no se seque antes de tiempo».

Se han convertido en un referente en los pavimentos para el sector agroalimentario y los entregan con certificación antibacteriana de por vida, «algo inimaginable hace unos años». Ponen los pavimentos en obra nueva, pero también hacen mantenimiento, corrigiendo problemas en instalaciones antiguas. Además, están trabajando en hacer los productos cada vez más sostenibles, como demanda el mercado.

El Grupo Bellvis también es especialista en piscinas. «Hace 30 años fuimos los primeros en España en vender limpiadores automáticos para piscinas. Eran aparatos muy caros para la época y vendíamos en toda España. Actualmente apostamos por el control de la desinfección del agua mediante el móvil de los alcaldes de las localidades. Desarrollamos un aparato y mediante una aplicación les llegan los niveles en todo momento y se dosifica automáticamente el producto que se necesita». Hasta el año 2008 tuvieron, incluso, equipo propio de construcción de piscinas, pero luego se centraron en reparación, filtración y sistemas de última tecnología para la desinfección.

El año pasado apostaron fuerte y consiguieron trabajar todo el verano. «Entregamos los materiales a las piscinas con el compromiso de recogerlo si luego había que cerrar por la Covid-19, mientras que otras empresas se quedaron paradas». Esperan que este verano sea «casi normal», aunque algún ayuntamiento ya les ha dicho que no va a abrir las instalaciones. También gestionan piscinas municipales en colaboración público-privada. 

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