Mesa abierta: El ADN emprendedor de Alex Dantart
- Alex Dantart: «Me defino como nitro y como hacker».
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Alex Dantart visitó la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza y contó a REDACCION cuáles son las claves que le han llevado a ser un referente del mundo digital. Alex Dantart es inversor, headhunter y consultor. Ha trabajado para Ibercaja o Balay, dirige el Founder Institute y ha fundado más de 30 startups. Con todo esto, ¿a qué se dedica realmente?
A Dantart se le ve una persona inquieta y con hambre de nuevos desafíos, y es que hasta su madre le pregunta cuál es su labor en el día a día. En la mesa abierta que tenemos con él nos cuenta que «en los últimos años, aunque sigo teniendo la vena de programador, todas las acciones van orientadas a emprender en el ecosistema de Aragón«. Aunque le cuesta definirse, cree que una buena palabra para presentarse sería mentor o “meneador”. «También me considero Business Angel y sobre todo hacker«.
En 20 años, Alex Dantart ha formado parte de 39 proyectos, de los cuales 14 los tiene abiertos actualmente. «Si algo me define es que me aburro rápido. Me gusta meterme en las fases iniciales de un proyecto y estar en todo lo que se suele mentorizar en un proceso como Founder».
El Director del Founder Institute en Zaragoza, la mayor aceleradora de proyectos en fase de idea a nivel mundial, reconoce a REDACCION que no se considera ningún experto en nada, aunque afirma tener una visión muy amplia. «No soy experto en SEO, pero puedo dirigir una reunión de la temática, y así lo mismo con inversión o diseño».
Aunque no se considera un inversor a grandes rasgos, sí que es su única faceta en varios proyectos. «Parece que estoy en muchos proyectos a la vez, pero en gran parte soy solo inversor. Haces una inversión suficiente para que el proyecto salga adelante y luego lo llevan una serie de personas. Esa es mi tarea de Business Angel, donde también me gusta estar encima. Mi agenda es básicamente estar todo el día tomando cafés con gente».
Si Dantart tiene que decidir lo que hace en una palabra, no lo duda, esa es nitro.
«En cualquier estado en el que esté el proyecto, mi labor es meter nitro. «Me gusta aprender poco de muchas cosas y ejercer ese punto de unión para que en un proyecto pueda meter mi nitro y se acabe desarrollando».
¿En qué proyectos ha participado Alex Dantart?
Cuando trabajas en tantos proyectos cuesta quedarse con uno, y es que según nos cuenta, todos le han servido para crecer. Aún así, destaca con el que empezó. «Sync es mi primer gran proyecto de emprendimiento. Es el que mejor me ha salido porque se vendió muy bien y por el crecimiento que tuvo. En 3 años estábamos 35 personas trabajando».
¿Qué necesita tener un proyecto para que una aceleradora lo tenga en cuenta?
Aunque cada aceleradora busca un tipo de proyecto, Dantart reconoce que todos tienen que tener algo en común, capacidad de crecimiento. «Hay aceleradoras que solo buscan fama, otras dinero y otras exigencia, como Founder Institute. Lo que tienen que tener en común todos es la clara posibilidad de crecimiento».
Alex Dantart:
«No recomiendo entrar al Founder Institute a gente que en 3 meses no vaya a acelerar o cambiar. Lo que busco es que se note un cambio del inicio al final, da igual que sea de dinero, visitas o fama, por eso doy tanta importancia al nitro y a los primeros días».
¿En qué se diferencian tres ecosistemas como Nueva York, Madrid o Zaragoza?
Alex Dantart ha vivido en ciudades como Nueva York o Madrid, y no hay mejor persona que él para contarnos las diferencias a la hora de abrir proyectos digitales. «Nueva York es con diferencia el lugar donde más colaboraciones hay. Es donde te puedes reunir fácilmente con grandes CEOs y hablar con ellos«.
El consultor destaca la diferencia entre España y Estados Unidos en cuanto a la mentalidad empresarial. «Aunque seas su competencia, los empresarios te cuentan cosas, todo lo contrario que en España, donde parece que cualquiera nos va a robar la idea. Buscamos la picaresca para robar las ideas a otros en lugar de aprender de ellas».
A nivel de España no cree que las diferencias sean tan grandes y afirma que entre Madrid y Zaragoza, lo único que afecta es la población. «Para mí no es exponencial el cambio. Según lo que he vivido no hay cambios salvo en dimensión. De hecho, Zaragoza se está viendo como una ciudad barata de desarrollo donde incluso empresas llegan de Madrid o Barcelona».
Alex Dantart:
«Nueva York es con diferencia el lugar donde más colaboraciones hay. Allí te puedes reunir fácilmente con grandes CEOs y compartir experiencias e ideas con ellos. En España parece que cualquiera nos va a robar la idea»
¿Cuál es el futuro de Internet según Alex Dantart?
Para Dantart en un futuro cercano cada vez va a ser más difícil diferenciarse en la red. «Internet está llegando a un punto en el que es tan normal como el grifo de agua. No puedes jugar con la grandeza de Internet para diferenciarte porque todos tienen esa grandeza«.
Si algo cree que va a necesitar el futuro de Internet, es «servir para cambiar nuestra forma de vivir. No nos hemos dado cuenta de lo que puede modificar nuestras vidas a mejor. Le estamos poniendo leyes y trabas para no crecer y no nos damos cuenta de que en 2030 Internet nos habrá cambiado toda la forma en que hacemos las cosas». «Me gusta pensar que el siglo XXI va a ser la era cognitiva, donde el ordenador va a entender al humano y va a ser algo intrínseco entre los dos».
LA OPINIÓN DEL EXPERTO NACHO PELÁEZ
Nacho Peláez. Responsable de Sistemas de Información de Cámara Zaragoza
Había oído hablar de Alex Dantart, pero no lo había conocido hasta esta mesa abierta. Es emprendedor, inversor y mentor, de esto no cabe duda viendo su perfil de LinkedIn. También nos dijo que echa de menos programar más a menudo y que se define como nitro-man, además de que le gusta proporcionar el empujón definitivo al arranque de ideas y proyectos.
Pero a mí lo que me llamó la atención es su forma de afrontar la vida desde el punto de vista de su trabajo, tan diferente a lo que vemos «normal» en nuestra cultura, su continua necesidad de crear y lanzar proyectos, su motivación ante los nuevos retos, su falta de miedo al error, a fracasar en esos lanzamientos, buscando siempre algo positivo en el análisis de cada proyecto tenga éxito o sea un fracaso.
No es fácil encontrar a personas que se sientan cómodas fuera de una zona de confort, normalmente nos cuesta salir de ella, en su caso ni siquiera le gusta que llegue a crearse esa zona de confort, antes busca otro nuevo desafío. Si nos paramos a pensar un momento da un poco de vértigo o como mínimo nos hace reflexionar sobre ello. Al menos a mí lo ha hecho.
En definitiva, ha sido un placer conocer a Alex, siempre dispuesto a aportar su visión a cualquier idea y con muchas ganas de seguir creando y apoyando nuevos proyectos.
LA OPINIÓN DEL EXPERTO RAMÓN AÑAÑOS
Ramón Añaños, consultor independiente de marketing y estrategia online.
En mi opinión, Alex vive en una contradicción. No hay más que ver su elaboradísimo LinkedIn para comprobar que desde muy joven escuchó en su interior un disparo de salida y empezó a correr en una carrera por la que ha transitado, muy deprisa, por proyectos en los que ha participado como trabajador, asesor, socio e inversor, poniendo a prueba conocimientos de programación, marketing, operaciones y dirección, en todo tipo de sectores y ubicaciones.
Ha ido muy deprisa, unas veces ha triunfado y otras no, pero siempre a un ritmo frenético. Su paso por los proyectos en los que participa es a veces fugaz. Ha podido ver como sus socios en algunos proyectos consiguen vender bien después de que él se haya salido y esté ya embarcado en otras cosas. Por el camino, ha atesorado experiencias, recursos y relaciones de gran valor, que a día de hoy, constituyen su gran activo.
Sin embargo, y esa es la gran paradoja, el proyecto en el que más éxito ha tenido, Sync, es aquel en el que más tiempo ha estado involucrado. Un proyecto en el que su compromiso no abarcó únicamente la fase de puesta en marcha, sino que también puso a prueba sus dotes para gestionar el día a día de una empresa que, eso sí, mantuvo en esos años un ritmo de crecimiento espectacular.
Por algo el presume de aportar «NITRO» a los proyectos en los que interviene.
