DestacadoEventos clubRedacción

«Un joven debe tener clara su meta profesional, y que para alcanzarla hay que atravesar pasos previos»

  • Herizont Innovación organizó el primer evento dentro del ciclo Tiempos de Cambio, dedicado a debatir sobre qué buscan en las empresas los jóvenes que se incorporan al mercado laboral.
IMG_3765

Encuentro Talento. Fotos: Arturo Gascón.

El objetivo era «unir mundos separados», pero pronto se vio que empresa y jóvenes tienen muchos puntos para el entendimiento. Club Cámara abrió este miércoles 9 de mayo su nuevo ciclo, Tiempo de Cambio, con el evento ‘Encuentro Talento‘ organizado por Herizont Innovación y animado por Eboca Vending, en el que se propusieron contrastar la visión de cuatro directivos con otros tantos jóvenes profesionales en el arranque de su experiencia laboral. La pregunta a responder: ¿cómo son las empresas en las que las nuevas generaciones quieren trabajar, qué buscan en ellas y viceversa?

El foro reunió sobre el escenario del Salón de Actos de Cámara Zaragoza a José Luis Latorre, director general de Inycom; Félix Arrizabalaga, gerente de Atades; Paula Sánchez, directora de la consultoría Serlog e impulsora del certificado Quiero Trabajar Aquí; y Jesús Fernández Tapias, responsable de recursos humanos de BSH. Junto a ellos, cuatro jovenes talentosos: Álvaro García, jefe de equipo de Motostudent Electric Unizar y encargado de proyectos de ingeniería en Herizont; Antonio Solans de la Vega, Student Brand Manager en Red Bull; Ángela Ranedo, responsable comercial en Hunteet; y Juan Chaves, fotógrafo freelance e impulsor de la comunidad Instagram en Aragón.

La sesión empezó fuerte. El confundador de Herizont Iván Romero lanzó una provocadora pregunta, basada en el tópico que tienen muchos jóvenes: «¿Son los empresarios el demonio?». Juan Chaves se puso de ejemplo para desmentirlo: «Desde el momento en que me hice autónomo ya soy empresario, y aquí me tienes con mi camiseta de Star Wars y mis pelos de loco». Por su parte Félix Arrizabalaga apuntó que «detrás de los tópicos hay prejuicios». «Fui delegado sindical, ahora soy directivo, y eso me ha hecho ver que es importante que en una organización convivan diferentes visiones, porque su contraste genera impulso«, opinó. Para Jesús Fernández Tapias, es clave «entender las tripas del negocio; en España nos sigue faltando cultura de trabajar conjuntamente para sacar adelante la empresa como proyecto común».

IMG_3767

¿Hay una falta de entendimiento entre ambas partes? Para Antonio Solans de la Vega, el problema tiene su origen en que «la universidad no te prepara para el mundo real». Juan Chaves opinó que la culpa también recae en «una generación de padres superprotectores que les siguen haciendo el Cola-Cao a sus hijos de 18 años». Arrizabalaga consideró que «no pasa nada porque cada uno tenga motivaciones diferentes en el trabajo, nuestra obligación como responsables de una empresa es detectar qué motiva a nuestros equipos». Para Ángela Ranedo, a un joven «le tiene que importar la nómina, claro que sí, pero sobre todo tiene que tener claro dónde quiere llegar, y que para alcanzar esa meta tendrá que pasar por etapas previas». Para José Luis Latorre, se esté en la posición en la que se esté dentro de la empresa, siempre hay que buscarse «automotivaciones» a diario.

Fernández Tapias se fijó en una diferencia entre los jóvenes de ahora y los de su generación: «Son capaces de decir más abiertamente aquello que no les parece bien, y creo que es bueno. Si te dicen que quieren tener más tiempo para hacer cosas fuera del trabajo, por algo será y hay que escucharlos». ¿Y qué buscan las empresas? Para Ranedo, «siguen siendo importantes los contactos para entrar, pero luego, además de acreditar unos conocimientos, te van a pedir habilidades sociales, actitud, personalidad… En definitiva, tienes que encajar en la organización«.

Uno de los problemas de estos últimos años ha sido la fuga de talento. Más allá de la situación de crisis, para Álvaro García hay un problema de comunicación: «Hay empresas increíbles en Aragón que casi están en el anonimato, y que van a buscar su talento fuera… Y gente con talento que se va fuera a trabajar porque no encuentran aquí oportunidades. Hay que ponerlos en contacto». Latorre se sumó a la idea, y lamentó que «Aragón pagará muchos años el talento que ha dejado escapar». Paula Sánchez matizó este negro panorama, al recordar que también «es positivo que la gente salga, tenga un recorrido profesional fuera, y pueda volver y aportar esa experiencia a la empresa aragonesa». «La clave está en el equilibro», puntualizó.

 

 

Compartir:
Redaccion